martes, 25 de marzo de 2008

Expolio en la Ermita de Taranco de Mena.

Merindades

18/03/2008
Taranco de Mena
Desvalijan por completo la iglesia y se llevan obras valoradas en 8.000 euros
El templo acoge cada septiembre la celebración del Día del Nombre de Castilla que reivindica el nacimiento del castellano en Taranco

Celebración del Día del Nombre de Castilla de 2007 en la iglesia de Taranco
Ana Castellanos,A.C.
La iglesia de Taranco de Mena, donde cada mes de septiembre desde hace 18 años se celebra el Día del Nombre de Castilla, en reivindicación del nacimiento del castellano en el antiguo monasterio de la localidad, ha sido víctima una vez más de los amigos de lo ajeno. El primer robo de una de sus campañas se produjo en el otoño de 2006. En la noche del jueves al viernes pasado, el templo fue desvalijado por completo, tal y como explica José Bustamante Bricio, presidente de la Asociación de Amigos de Taranco, el colectivo que logró levantar la iglesia desde la ruina.
Los ladrones destrozaron la puerta con una barra de hierro, según relata Bustamante Bricio, y dejaron la iglesia abierta de par en par. Por ello, los vecinos de Taranco de Mena, que pasan a su lado para acceder o salir de uno de los barrios del pueblo, se percataron el viernes por la mañana de que algo había sucedido la noche anterior. Al entrar, quienes custodian el templo tras el acuerdo al que llegaron con el Obispado de Santander en el año 1990, comprobaron que los ladrones se habían llevado todo lo que habían podido y querido, «hasta unas banderas que estaban guardadas en un arcón». La única imagen de la Virgen que guardaba la iglesia, una espada del Cid, candelabros, una tabla románica con una pintura al fresco de San Pedro de gran valor histórico, una escultura de San Sebastián, sillas, un cáliz, cruces metálicas, corporales y un bajorrelieve de San Emeterio y San Celedonio son algunas de las propiedades de la asociación que han desaparecido.
Los ladrones, no solo se llevaron piezas, sino que también destrozaron otras, como una cabeza de terracota que reproducía al Abad Vitulo y que era obra de Alberto Foraster. En total, las pérdidas están valoradas entorno a 8.000 euros, según los cálculos de Bustamante.
Lo cierto es que el templo, donde apenas se celebran algunos funerales, está muy alejado de cualquier núcleo habitado. «Son iglesias solitarias, sin guardia y custodia y los ladrones tienen todo el tiempo que quieren», lamenta el presidente de Amigos de Taranco.